Una planta medicinal es aquella que se puede utilizar, entera o en parte (hojas, flores, frutos, cortezas, tallos o raíces) para tratar afecciones de personas o animales. Su acción terapéutica es debido a la existencia de unas sustancias químicas denominadas principios activos.
Las plantas medicinales tienen riesgos: Efectos Adversos, Interacciones con medicamentos, alimentos y Contraindicaciones.